A finales de junio de 2024, la Secretaría de la Paz de Servas Portugal celebró una conversación en línea en torno al tema: "Paz interior a través de viajes transformadores". La contribución de uno de nuestros miembros fue tan apreciada que le pedimos que la pusiera por escrito.
Esto es lo que dijo Manuela Gama:
Manuela Gama es miembro de Servas Portugal desde 2005.
Aprendí a ser anfitrión Servas en Brasil durante un viaje de dos meses en 2005. Fui recibida por 11 anfitriones Servas. Una vez de vuelta en casa, me fue muy fácil empezar a acoger a gente que lo solicitaba. Marina García de Pontevedra es la primera entrada en mi libro de visitas. Llegó el sábado 8 de abril de 2006. Desde entonces ha habido un total de 62 visitas, sin contar los visitantes que repiten. Algunos volvieron porque nuestra conversación necesitaba más tiempo, para seguir practicando portugués, o simplemente porque mi casa es un lugar que se presta a escribir, leer y descansar.
Cuando llegó el momento de las despedidas, sentí que el enriquecimiento cultural y la comprensión del mundo que me aportaba cada visita significaba que había recibido mucho más de lo que mi hospitalidad había conseguido ofrecer.
Si busco un nexo común de mayor relevancia en todos estos encuentros -que hubieran sido muy improbables sin Servas- lo que destaca no es el placer de compartir, de estar juntos en paseos o comiendo. Tampoco elegiría las amenas discusiones sobre libros, películas o política. Todo eso fue/es genuinamente bueno y enriquecedor, pero lo que fue/es verdaderamente transformador fue/es abrir la puerta a extraños en total confianza.
Cuando llegaron mis primeros visitantes Servas en 2006, varias personas de mi familia pensaron que era un riesgo y que yo era… imprudente.
Pero, muy pronto, después de unirme en momentos de socialización Servas, los miembros de mi familia ya estaban preguntando: "¿Cuándo vienen los próximos?"
Aquí radica la transformación: los miedos se convirtieron en confianza. El otro desconocido se convirtió en uno de nosotros.
Y esta confianza, presente desde el momento en que se abre la puerta, se instala luego en una interacción fácil e inmediatamente igualitaria. En la LOI (Carta de Presentación) no hay diplomas ni marcas de estatus social, por lo que la comunicación es verdaderamente entre iguales. La aceptación está libre de condicionamientos. Permite una inocencia muy poco frecuente.
En la sociedad, en la "vida real", esta libertad es poco frecuente, por lo que ejercerla es potencialmente transformador: muestra cómo, a lo largo de dos días, es posible una comunicación estrecha y fraternal.
¿No es esta cercanía confiada la que abre los caminos al altruismo y la cooperación, fundamentales para la paz mundial?".
Por: Manuela Gama, Secretaria de la Asamblea General de Servas Portugal (2022-2025)